El traslado definitivo del Museo Baltasar Lobo al Ayuntamiento viejo ahorrará al Consistorio zamorano 7.500 euros al mes, que es la renta que actualmente se paga por la Casa de los Gigantes. El alquiler, tras el último contrato firmado a principios de este año por un año más, ha quedado establecido en 90.000 euros, cifra bastante inferior a los 110.000 que ha llegado a costar a las arcas municipales la utilización del inmueble como centro de arte dedicado al escultor zamorano. El Museo Baltasar Lobo ha pasado a ser uno de los asuntos en los que más dinero se ha invertido por parte del Ayuntamiento de Zamora, que entre alquileres, arreglos y cambios de destino ha desembolsado ya 1,2 millones de euros, a falta de las pertinentes obras a realizar en el edificio de la Plaza Mayor durante el próximo año.

"Nos cuesta muchísimo dinero al año". Son palabras de Francisco Guarido en relación al alquiler de la Casa de los Gigantes. "Desde el último contrato, pagamos 90.000 euros al año. Es muchísimo dinero. Lo que buscamos es tener el Museo Lobo en un edificio municipal. Y, por cierto, en muy buena situación, en plena Plaza Mayor", asegura el alcalde de la capital. El contrato de arrendamiento finalizará este mes de diciembre. "Es improbable que podamos efectuar el traslado en diciembre o enero, pero vamos a trabajar por que sea el menor tiempo posible", analiza el regidor. "Por el momento, hay 50.000 euros presupuestados para trabajar en el proyecto", anuncia el alcalde. A ello habría que sumar la propia obra, que según estimaciones de años atrás podrían alcanzar los 300.000 euros.

Una gran inversión

Los alquileres, proyectos, obras y cambios de destino del Museo Lobo han costado al Ayuntamiento 1,2 millones de euros hasta el momento. Se pagaron 496.000 euros por el alquiler de la Casa de los Gigantes entre 2009 y 2013; 180.000 euros por los años 2014 y 2015; 185.000 euros por el proyecto de museo elaborado por Rafael Moneo que nunca llegó a nada; 245.000 euros por el arreglo de la Casa de los Gigantes; y 54.000 euros por el traslado del museo de la iglesia de San Esteban a su actual ubicación.