La idea surgió en una terraza de un bar de Salamanca, cuando un grupo de amigos esperaba pacientemente a ser atendido por el camarero. Entre ellos estaba el zamorano Pablo de la Fuente, que vio claro en ese momento su trabajo de fin de grado. "Encontré la solución para no tener que esperar más por unas cervezas", bromea este ingeniero informático. El proyecto, bajo el nombre Pick & Order, es una aplicación móvil que permite acceder a todos los servicios y productos que ofrece un bar o restaurante sin tener que esperar a ser atendido para pedir una consumición. Simplemente se solicita a través del móvil y el camarero la lleva a la mesa.

La finalidad de esta aplicación es "poner a disposición del cliente toda la información de la manera más fácil y eliminar los tiempos de espera, que el cliente salga pensando que se le ha atendido rápido, que no le ha tocado esperar. Y además, de una forma muy sencilla", resume el zamorano.

Una de las características más interesantes del proyecto es que el servicio no solo está orientado al cliente, sino también al trabajador. "Ellos también lo pueden utilizar en sus dispositivos y después de que la comanda se recibe directamente desde el usuario, el sistema ayuda a que tanto el cocinero vea que está pendiente como que el camarero sepa si está a punto de salir y la entregue al comensal", explica. Una aplicación que también sirve en el caso de negocios que cuenten con repartidores. "Se puede adaptar a las posibilidades y los roles que tenga cada restaurante", asegura.

Visualmente, la idea se centra en tener tanto en un servicio web como en un dispositivo móvil "acceso al restaurante para seleccionar tu comanda y enviarla directamente a la cocina, sin esperar a que el cliente se decida o el camarero quede libre. Su potencial reside en que se eliminan todos estos tiempos de espera", valora.

Detrás de esta idea hay una trabajo de meses, que además se ha completado con unos cursos impartidos por la Universidad de Salamanca de formación y plan de negocio. "Aprendes a crear tu propia empresa para poder darle salida a tu idea más tarde", apunta De la Fuente. Esta formación le ha ayudado "a verlo todo desde un punto de vista más global, a evolucionar la idea y a enriquecerla con más aspectos para que sea algo más factible", subraya. Otra zamorana, Lucía Tesón, ha ayudado con el diseño del logotipo, "que sirve para hacer la aplicación más atractiva", agradece.

Para su creador, los beneficios del uso de Pick & Order están más que demostrados. "Este tipo de herramientas son muy atractivas para la gente joven, lo que hace que los locales incrementen sus ventas, así que sería una ganancia colateral, porque no es el objetivo principal, que se basa en mejorar el servicio del usuario en el restaurante", relata. Una aplicación que podría desarrollarse aún más. "Los productos se pueden filtrar por una serie de etiquetas, como menús para celíacos o vegetarianos, platos que no tengan cebolla o el número de calorías", pone como ejemplos. "Estos filtrados ayudarían a elegir mejor, además de estar acompañados por la descripción de cada plato y una imagen de lo que ofrece la carta".

Por otra parte, asegura que el negocio que lo quiera poner en marcha "necesita un coste de inversión mínimo. Solo si el establecimiento tiene mucha capacidad haría falta un servidor más grande para aguantar todas las peticiones", considera.

Desde Barcelona, donde ha comenzado a trabajar hace apenas dos meses, ultima los detalles para la defensa de su proyecto de fin de carrera, que le traerá de nuevo al campus en junio.