La Hermandad Penitencial de Nuestro Señor Jesús, Luz y Vida descarta pedir responsabilidades judiciales a la última junta directiva que lideró Jesús de la Concepción y baraja convocar una asamblea extraordinaria para abordar los problemas económicos que atraviesa e incluso, a medio plazo, encargar una auditoría económica, según declaró a este medio su presidente Miguel Ángel Regueras una vez concluida la asamblea general de la hermandad, desarrollada de "manera tranquila" a puerta cerrada ayer en un lleno salón de la Junta pro Semana Santa.

El presidente, que ayer debutaba en su cargo ante los hermanos que le eligieron el pasado mes de noviembre, descartó taxativamente emprender medidas judiciales contra su predecesor Jesús de la Concepción y su equipo. "Acabamos de salir de una confortación judicial que no ha llevado a ninguna parte y no vamos a comenzar otra".

En cuanto al estado de las cuentas calibró en "unos 7.000 euros el déficit actual" a lo que habría que sumarle el préstamo que ha recibido de la Junta pro Semana Santa para poder sacar el desfile a la calle el Sábado de Lázaro y el pago de las costas del juicio que perdieron contra la familia del escultor Hipólito Pérez.

La puesta a punto de las anteriores andas con las que la imagen que realizó Pérez Calvo debe procesionar el Sábado de Lázaro, tal y como obliga la sentencia judicial "supone un desembolso de algo más de 5.000 euros porque hemos tenido que cambiar todo excepto el hierro", certificó el presidente. Para poder afrontar este fuerte desembolso para las maltrechas arcas de la penitencial, la hermandad cuenta con un préstamo de 5.000 euros de la Junta pro Semana Santa que "devolveremos con facilidades", certificó Miguel Ángel Regueras. A mayores la hermandad debe afrontar el pago del litigio contra la familia del escultor que "Ronda los 8.000 euros, pero desconocemos la cantidad exacta porque todavía estamos pendientes de conocer la tasación de las costas", afirmó.

Además, el presidente hizo público que "el obispo de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán, ha sido el que nos instó a que se cerraran los expedientes a los hermano de paso" que volverán a cargar a las órdenes de Daniel Martín.

La penitencial, que en los últimos años ha sufrido una merma de hermanos, comenzará a remitir cartas a las personas que se han dado de baja a fin de "transmitirles que serán bienvenidos" porque "nuestra línea de trabajo es recuperar el espíritu fundacional de la hermandad y trabajar para que Luz y Vida recupere su estado normal".

Este año el recorrido será el de años anteriores, pero de cara a las siguientes Semana Santa la directiva ha planteado la recuperación del itinerario fundacional. "Si fuera posible, volveríamos a salir por la Puerta del Obispo y las peñas de Santa Marta".