La cobertura de Internet en la provincia de Zamora mejora a paso lento, pero está todavía muy alejada de unos valores que puedan considerarse como normales en el conjunto del país. Numerosos pueblos de la provincia no tienen acceso a la red y más de una veintena tienen una red de conexión que puede ser catalogada de "pésima". Así se desprende de un informe realizado por la operadora de servicios por satélite Quantis con datos de la Secretaria de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información. Hay que destacar, no obstante, que la población "desconectada" se ha reducido a la mitad en el último año (en términos nacionales). En Zamora la cifra también ha caído considerablemente.

El informe en cuestión pone de manifiesto que los municipios de Abezames, Salce, Losacio, Gallegos del Pan y Fuente Encalada tienen una infraestructura que apenas llega al 10% de los hogares, lo que les convierte en zonas de sombra donde conectarse a Internet se convierte en una odisea. A estos hay que sumar otra quincena con una conexión pésima, municipios que según los datos de Quantis son Pedralba de la Pradería, Villardondiego, Perilla de Castro, Videmala, Vallesa de la Guareña, Vegalatrave, Samir de los Caños, Rábano de Aliste, Peque, El Maderal, Losacino, Viñas, Villaseco del Pan, Manzanal de los Infantes, Gamones, Fuentelapeña, Castrillo de la Guareña (dentro de lo deficitario de su conexión, están ordenados de peor a mejor infraestructura).

No obstante, cabe señalar que el 75% de los municipios de Zamora, lugares en los que viven la mayoría de los zamoranos -entre otros aparecen aquí Zamora, Benavente y Toro, los tres municipios con más vecinos- tienen una calidad de conexión muy buena, pues se encuentra en todos los casos entre el 90 y el 100% de la que existe en otras provincias y ciudades.