Tomar la justicia por cuenta propia no trae nunca buenas consecuencias. Esa nefasta decisión la tomó un hombre que, tras ser el principal acusado en un juicio, se encontró con uno de los declarantes que había testificado en su contra durante la vista y decidió agredirle en la calle, provocándolo solo contusiones leves.

En el Juzgado de la Penal de Zamora debía comparecer esta semana el supuesto agresor, quien reconoció los hechos ocurridos, por lo que finalmente se pudo llegar a un acuerdo entre la Fiscalía y el abogado de la defensa para no tener que celebrar el juicio por este caso de obstrucción a la justicia, al que se le sumaba una falta de lesiones.

De este modo, la juez dictó una sentencia condenatoria de seis meses de prisión, a la que se le añade una multa de 450 euros y una pena de multa que asciende a 90 euros más por la falta de lesiones, además de indemnizar a la víctima por los daños y al Sacyl.