La "poca sensibilidad y respeto" mostrados por la Administración hacia la justicia gratuita (el conocido como turno de oficio) por el que los letrados cobran "cantidades irrisorias, impensables en otras actividades profesionales", centró parte del discurso ofrecido ayer por Norberto Martín Anero, el decano del Colegio de Abogados durante la festividad del colectivo, San Ildefonso, celebrada en la Audiencia Provincial. El máximo representante de los abogados dijo confiar en que la nueva Ley del Derecho de Defensa, que regulará el turno de oficio, introduzca mejoras para el desempeño de esta función que beneficia a las personas más desfavorecidas.

Norberto Martín destacó la función de los abogados como "protectores de las libertades y derechos de los ciudadanos" y señaló a la profesión como "clave en el organigrama judicial" al "aproximar la justicia al ciudadano".

En el acto institucional juraron como abogados dos jóvenes letrados que se incorporan al Colegio y recibieron la insignia de plata diez colegiados por sus 25 años de ejercicio profesional: María Jesús Porto Urueña, José Luis Celemín Santos, Marta Rodríguez Valdesogo, Eloy Sampedro Bañado, Camilo Hernando Sanz, María Pilar Pérez Melón, Miguel Gómez de Liaño y Botella (ausente), María Paloma Prieto Sánchez, María José León Rodríguez y Santiago José Vidales García. El Colegio otorgó la insignia de oro por los 50 años de colegiación al abogado zamorano Valeriano Enríquez González, distinción que recogió en su nombre su hija, Margarita Enríquez.