La Corporación provincial visitó ayer, por primera vez en conjunto, el teatro Ramos Carrión a petición del grupo socialista. Una visita en la que "hemos podido detectar pequeños defectos de remates" además de "las goteras", apuntó tras el periplo el portavoz del PSOE, Antonio Plaza, en relación a un problema en el que la Diputación ya ha tomado medidas al comunicar al Ministerio de Fomento la situación para que ordene a la adjudicataria la subsanación del problema. En cualquier caso, Plaza insiste en que "nuestra preocupación es hacer rentable la inversión tan alta realizada en el Ramos para que no se convierta en un edificio muerto y esté siempre a disposición de los vecinos de la provincia".

A la visita, estrictamente privada, asistió un nutrido grupo de diputados de las cuatro formaciones: PP, PSOE, IU y Ciudadanos.