Un total de 114 mujeres embarazadas de Zamora, 1.659 en todo Castilla y León, se han vacunado ya dentro de la campaña que la Consejería de Sanidad puso en marcha el pasado 10 de diciembre atendiendo a las recomendaciones científicas ante el incremento de casos declarados de la enfermedad en los últimos años, especialmente durante 2015, según informa la agencia Ical.

La vacuna se ofrece, de forma universal, voluntaria y gratuita, a todas las mujeres en periodo de gestación (en Castilla y León se registra de media unos 17.500 embarazos anuales, poco más de un millar en Zamora), con independencia de su estado previo de vacunación. La administración de la vacuna se realizará, con carácter general en la semana 28, aprovechando que las mujeres acuden a consulta para iniciar la preparación al parto, por lo que están siendo las matronas de Atención Primaria las encargadas de administrarla.

Acceso prioritario

Dado que la vacuna no es eficaz cuando se administra con menos de quince días de diferencia con el parto, se recomienda administrarla antes de la semana 36. Así, con el fin de facilitar el acceso prioritario de las mujeres embarazadas que ya han superado esa semana 36 de gestación, la Consejería de Sanidad diseñó un sistema de captación para dar prioridad a aquellas embarazadas que se encuentran entre la semana 36 y 38 y que en la Comunidad se estima que rondan el millar. Asimismo, para atender a las mujeres que se encuentran entre la semana 28 y la 36, la Junta recomienda que acudan, escalonadamente y también con cita previa, a la consulta de su matrona.

La tosferina, informa Sanidad, es una enfermedad que puede ser grave y precisar hospitalización, dejando secuelas o incluso llegando a ser mortal en los bebés, mientras que por lo general cursa con carácter leve en los adultos, motivo por el que esta campaña responde al objetivo de proporcionar inmunización a los recién nacidos a través de la transmisión, por parte de sus madres. La vacunación en los niños se produce a los dos, cuatro, seis y dieciocho meses, además de una dosis de recuerdo a los seis años. La tosferina mantiene en España un progresivo aumento en incidencia, hospitalización y mortalidad desde 2010. La enfermedad tiene una presentación epidémica cíclica cada cuatro o cinco años, y se han detectado cuatro ondas en los últimos 15 años. En Castilla y León, hasta noviembre, se habían registrado 212 casos de tosferina, 31 en menores de tres meses, la horquilla que registra mayor hospitalización.