En el último Pleno del año 2011, el Partido Popular y el PSOE alcanzaron un acuerdo junto al resto de formaciones, que en aquel entonces eran Izquierda Unida y Adeiza. La moción presentada por el PSOE, que instaba a la Junta de Castilla y León a "declarar el Puente de Piedra de Zamora como Bien de Interés Cultural y acometer una actuación urgente de consolidación y restauración de los elementos más deteriorados de la infraestructura", fue aprobada por la totalidad de los grupos. No era una sorpresa, dado que un día antes de ese Pleno, la otrora alcaldesa, Rosa Valdeón, y el portavoz socialista, Manuel Fuentes, habían acordado impulsar de manera conjunta este proyecto tan necesario para la ciudad de Zamora.

Pese al acuerdo, el Partido Popular se mostró algo escéptico de que la restauración llegara a la capital en un breve periodo de tiempo. El exconcejal de Cultura, Francisco Javier González, puso en duda "la capacidad económica de la Junta" para realizar el proyecto, aunque afirmó con seguridad que el gobierno de Herrera tenía un "demostrado afán colaborador". Cuatro años después, el asunto llega a las Cortes de Castilla y León con el voto en contra del Partido Popular y el apoyo del resto de formaciones representadas.