"Las administraciones públicas deben ponerse de acuerdo en cuanto a la respuesta en protección y servicios sociales para garantizar mejor los derechos reconocidos". Esta es una de las reivindicaciones que ayer se dejaron oír en la plaza de Castilla y León durante el acto de apoyo a las personas sin hogar, protagonizado por los usuarios de la Casa de Acogida Madre Bonifacia.

Con una enorme vivienda hecha de cartón de fondo, uno de los usuarios fue el encargado de leer el manifiesto para celebrar la campaña "Nadie sin hogar", que lleva ya cinco años de vida. "Queremos alzar nuestra voz a la sociedad", comenzó el portavoz, para también reivindicar el derecho de estas personas a la salud. "No es un negocio y no se nos puede tratar con prejuicios ni diferencias en el tratamiento por pertenecer a otra comunidad autónoma. La salud es la suma de habitabilidad y tratamiento", apuntó.

Esta ubicación física es la única manera para que formen parte de la sociedad "y poder opinar y comunicar inquietudes por los cauces normales que el resto de los ciudadanos". Por este motivo, apuntaron que aunque llevaran tiempo en condiciones de precariedad, "queremos establecer relaciones positivas y enraizarnos en la comunidad, en la que se nos acoja de la que queremos formar parte y mejorarla", añadieron en el comunicado, que terminó con un llamamiento a los medios de comunicación para que se les trate "con un enfoque positivo".

Este acto simbólico finalizó entre aplausos y con la suelta de decenas de globos, color verde esperanza, como apoyo a estas personas.