El pastor asesinado desapareció el día después de su cumpleaños, la noche del 14 de febrero de 2014. Esa fue la fecha que ayer dio su hijo y que, el autor confeso del homicidio, el ganadero para el que trabajaba la familia búlgara, Juan Carlos B.R., ofreció a la Guardia Civil cuando le detuvieron, si bien en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial dijo no recordarlo. El hijo del fallecido admitió que su padre se había "enfadado con mi madre", la otra imputada en el crimen, Sonia K., pero no porque, como ella dijera, el pastor quisiera celebrar su cumpleaños la noche del 13 de febrero de 2014 y ella le dijera que no había dinero.

La versión del vástago, que se emocionó varias veces al recordar a su progenitor, es bien diferente: "ella hablaba mucho, "voy a hacer esto..." y él no quería, pero ella no hace caso a nadie. Mi padre se levantó de la mesa", donde estaban cenando, "y se fue al sofá y al día siguiente, antes de irme a trabajar, estaba en casa". Cuando volvieron su madre y él, "ya no estaba". Frente a lo que su madre había afirmado el día antes ante el jurado, el joven, de iniciales K.O.K, negó que su padre desapareciera en muchas ocasiones y llegara a veces a estar sin dar señales de vida durante meses, "eso nunca", reiteró, "cuando salía era con ella o con nosotros". Los malos tratos a la madre, quien se echó a llorar al escuchar las palabras de su vástago, no existieron: "No salía a emborracharse ni la ha agredido. Nunca le vi pegarle", ni a los hijos. El joven declaró que "mandaba ella en casa", por eso la noche de la discusión "no hubo agresión". Negó que la quemara en con cigarrillos y que la hubiera dejado sola a la puerta de un cementerio cuando él era pequeño. El hijo de la pareja búlgara, que trabajaba en la explotación de Juan Carlos, contó que fue él quien empujó a su madre a emprender la búsqueda del padre el 14 de febrero por Santa Cristina, "ella no quería que entrara a preguntar a los bares. Y me dijo que estaba conectado en Facebook en ese momento". Más adelante, ella le contó "que había hablado con él y le había dicho que no la quería, que está con otra mujer y no iba a volver nunca". La relación con su madre, con la que vivía, se rompió cuando "encontré a Juan Carlos en su cama escondido bajo las sábanas". Era el 3 de marzo. El 22 de marzo, el joven lo cuenta en la Guardia Civil.