"Quizá me perdí algo, pero no recuerdo que el mundo reaccionara igual con el 11-M (193 muertos, 1.800 heridos) Igual es que no había Twitter". Este mensaje fue publicado en la madrugada del sábado por el periodista Lorenzo Milá. Una reflexión que indica la importancia que las redes sociales han cobrado en el momento en que se producen este tipo de desagradables episodios. Twitter, Facebook o Instagram han sido un clamor continuo a lo largo del fin de semana. Apenas unos minutos después de que se conociera el alcance del ataque terrorista en París, los usuarios de las diferentes redes sociales se enfrentaban en debates ideológicos entre quienes generalizaban acerca del Islam y los que apuntaban que tan solo una parte muy reducida de personas que profesan esta religión son quienes utilizan la violencia.

"Se dice, pero no lo suficiente: Los refugiados no traen esto, huyen de esto. Que quede claro, por favor". Un usuario de Twitter publicaba este mensaje apenas dos horas después de que las noticias sobre el ataque terrorista comenzaran a aparecer. Un tuit que provocó una auténtica oleada de respuestas entre quienes estaban de acuerdo y quienes albergaban dudas sobre la entrada de refugiados sirios a Europa. "¿Puedes asegurar que no vienen terroristas entre ellos?", le respondía otro usuario.

Los principales foros donde los zamoranos comentan, al amparo de los medios de comunicación, también clamaban ayer contra la "extrema violencia" de los diferentes ataques terroristas perpetrados en las calles de la capital gala. "Es una auténtica desgracia que esto siga ocurriendo en el mundo", apuntaba uno de los usuarios. Sin embargo, quizá la que con menos palabras dijo más cosas fue otra de las titulares de un perfil de Facebook que, minutos después del atentado, solo pudo acertar a decir: "Puff....".