"Torres más altas han caído". Con tal resignación habla el secretario general de la FRAH, José Luis González Prada, de la posibilidad de que la fundación hispanolusa desaparezca después de más de una década de esfuerzos y proyectos. En el caso de que los avales económicos no sean los necesarios para su sostenimiento, "la fundación tendría que terminar, lo cual sería una auténtica lástima". Eso sí, razona que, en ese caso, "cada parte tendrá que justificar su posicionamiento", deja caer. La medida afectaría solo a la sede zamorana, ya que la lusa está sostenida por sus patronos portugueses, en concreto, por la Cámara municipal, el Instituto Politécnico, la universidad de Tras Os Montes y la cámara municipal de Amarante.
