La diputada de IU, Laura Rivera, reprueba el gasto de la institución provincial de 70.000 euros en contratar a una consultora para el asesoramiento técnico y económico sobre la futura gestión del teatro Ramos Carrión. En este sentido, la diputada esgrime que "después de más de diez años, de triplicar la inversión prevista en la remodelación y de invertir hasta el momento más de 17 millones de euros, la Diputación no tiene ni idea de qué hacer con este edificio". Rivera, que insiste en la futura "privatización" de la infraestructura, se muestra muy crítica con la decisión de "gastar esta cantidad solo para poner en un documento lo que quieren hacer con el teatro". El plazo para la elaboración del pliego de condiciones es de cuatro meses, "esperemos que después de este tiempo sepan a qué dedicar este edificio".

Tras rechazar un convenio con el Ayuntamiento para coordinar la gestión de los dos teatros de titularidad pública, Ramos Carrión y Teatro Principal, "se podía pensar que la Diputación tenía un proyecto en mente para el uso del edificio remodelado". Sin embargo, "nada más lejos de la realidad", contrapone Rivera.