Quienes eran administradores de Pevafersa, cuando un empleado de 25 años en prácticas murió electrocutado, en marzo de 2007, deberán abonar 45.000 euros cada uno para evitar el cumplimiento del año de prisión al que les condenó ayer el Juzgado de lo Penal. El expresidente, Vicente Fernández, deberá pagar la cantidad en tres meses; y el otro directivo y cofundador de la empresa con el anterior, Álvaro Sánchez, en quince días. Esa es la condición impuesta por la magistrada para suspender la pena de cárcel de los dos procesados, además de que no delincan en dos años.

El dinero servirá para completar los 210.000 euros de indemnización que recibirá la familia del empleado fallecido, de iniciales J.B.D., cuantía de la que las aseguradoras han aportado ya 99.954,14 euros. Estos dos procesados deberán, además, abonar 2.000 euros y 4.000 euros de costas procesales, respectivamente, tras ser condenados cada uno de ellos a tres meses de cárcel por un delito contra los derechos de los trabajadores, por incumplir las normas de Seguridad y Salud Laboral; y a nueve meses de prisión por un delito de homicidio imprudente.

La magistrada de lo Penal impuso ayer la misma pena de cárcel y por los mismos delitos al ingeniero técnico, J.A.H.G., y al encargado de obra, P.S.S.: al primero por elaborar un estudio básico de seguridad que no incluía referencias a esas tareas y no exigir el cumplimiento de las medidas de seguridad e higiene en el trabajo; al segundo, por no detener el suministro eléctrico ni de limitar el acceso a la zona de tensión media, según la acusación de la Fiscalía.

El otro imputado, el conductor del camión-grúa, cuyas iniciales son B.P.M., en cuya pluma en la que iba la víctima del accidente laboral, se le impone un año de cárcel por un solo delito, de homicidio imprudente, por "obviar las más elementales normas de cuidado", al aproximar el vehículo a la línea de media tensión que iban a sustituir, en la finca de Villaguer, en Toro, y de la que no se había cortado el suministro.

Los abogados de estos cinco imputados llegaron ayer a un acuerdo con la fiscal para evitar el juicio, en base al que la magistrada aplicó para rebajar las penas de cárcel las atenuantes de reconocimiento de los hechos y de dilaciones indebidas en la investigación, ya que han pasado ocho años desde que se inició el 22 de marzo de 2007. Las penas de prisión que inicialmente solicitaba la Fiscalía eran de tres años y medio para Fernández, Sánchez, el ingeniero y el encargado de obra; y de dos años y medio, para el conductor.

El joven murió cuando se encontraba en una cesta adaptada a la pluma del camión con otro compañero para colocar cables en una torre de tendido eléctrico sin tensión, pero en un zona de peligro, puesto que no se había cortado el suministro en la vieja torre. La electrocutación tuvo lugar cuando la grúa iba a descender para recoger a otro empleado y la cesta se acercó a la línea antigua de tensión. La corriente eléctrica entró por la mano que el fallecido tenía apoyada en la barandilla de la cesta y salió por su cadera, que tocaba un tornillo metálico de la cubeta, de acuerdo con el escrito de la Fiscalía Provincial, en el que se describen los hechos probados.