Marco Antonio Martín Bailón es el nuevo vicepresidente del IEZ Florián de Ocampo, institución que ha renovado la mitad de los cargos y donde se ha producido un relevo generacional.

-Usted es el nuevo vicepresidente del "Florián de Ocampo", ¿qué le movió a presentarse a este cargo?

-El libro de Avrial que publicó el Instituto de Estudios Zamoranos me permitió conocer en profundidad la institución y darme cuenta de que tenía una deuda pendiente con el centro. Tomé la decisión de presentarme porque estoy en Zamora e igual que hay personas que se implican en el ámbito deportivo, por qué no en el ámbito cultural en la junta directiva del Florián de Ocampo.

-Usted es la cara visible de una renovación generacional.

-La candidatura fue consensuada con Pedro García, el actual presidente, para conseguir dar una ilusión nueva y para vencer así la inercia del Florián de Ocampo, dado que el instituto se ha resentido con los cambios de sedes de la oficina y de la biblioteca de los últimos años, aunque ahora ya cuenta con todos los servicios unificados. En la lista que encabezo se incorporan nuevas personas y otras cambian de áreas. Sergio Pérez pasa a ser el secretario, como tesorero contamos con Julio Pérez Rafols. El área de Historia y Geografía la ocupa José Carlos de Lera, mientras que la de Arqueología se hace cargo Hortensia Larrén Izquierdo; la vocalía de Derecho y Economía recae en Enrique Alfonso Rodríguez García y la de Sociología y Ciencias de la Información es competencia de Juan Andrés Blanco Rodríguez.

-¿Qué ideas tienen claras que van a desarrollar?

-Mantendremos lo que funciona bien e intentaremos mejorar y adaptarnos al siglo XXI, porque la manera de trabajar de ahora marcará la cultura de los próximos 15 años. No podemos anclarnos en la forma de trabajar de cuando el instituto comenzó su actividad. Lo más urgente es dar a conocer la institución a la sociedad zamorana. El IEZ Florián de Ocampo cuenta con su web y presencia en las redes sociales, que habrá que dar un empujón. También vamos a poner al día el anuario porque ahora mismo tenemos dos acumulados. Es una de las publicaciones que vamos a poner al día con rigor. Otro puntal son las becas, que pueden ser una manera más de anclar culturalmente la gente a Zamora. Desde hace casi un año se está llevando a cabo una labor de actualización de las becas, una función que queremos acabar cuanto antes para relanzarlas en las nuevas circunstancias económicas. Tendremos que estudiarlo bien porque no sabemos todavía si se convocarán el mismo número de ayudas ni de qué cuantía economía serán.

-¿Las enfocarán a doctorados?

-El problema que tenemos con la beca es de índole presupuestario. El Instituto de Estudios Zamoranos ha adquirido unos compromisos con unos becarios y estos con la institución y al concluir sus trabajos reclamarán la cuantía económica al IEZ. En los próximos meses decidiremos qué becas daremos y de qué cuantía porque el número de investigadores universitarios está bajando en los últimos ejercicios. Desde luego las de doctorado son las de máximo rigor. Quien vaya a hacer su tesis doctoral sobre un tema zamorano será muy interesante como posible becario.

-Con la crisis el Florián de Ocampo ha visto como el presupuesto que le asigna la Diputación de Zamora se reducía. ¿Recurrirán a apoyos del sector privado?

-No nos cerramos las puertas, pero tenemos que analizarlo detenidamente. La cuestión económica no es lo más preocupante. Creo que hay ser muy rigurosos a la hora de gastar el dinero y asignarlo en las becas. Además, queremos abrir el abanico a la actividad cultural que llega a la población.

-¿De qué manera?

-El Florián de Ocampo cuenta con más de 250 socios, de todas las más diversas profesiones y disciplinas e incluso de múltiples edades, lo que te da pie a muchas y variadas actividades. Así en noviembre desde la vocalía de Arte han promovido una conferencia-concierto sobre Juan García de Salazar en el que intervendrá el profesor de musicología de la Universidad de Castilla La Mancha, Paulino Capdepón, y donde actuará el coro Camera Primo Tempo. Es una propuesta cultural que reporta algo a la sociedad y que quizá alguien se anime a formar parte del instituto para lo que hay que complementar una solicitud, con un pequeño currículum y contar con el aval de varios socios.

-¿Cuál es el perfil del socio del Instituto?

-Es el de gente preparada de múltiples disciplinas porque somos un centro adscrito al CSIC. Somos órgano consultor en materia de Cultura de la Diputación y entidad asesora de la Junta de Castilla y León y ya se nos pidió informes para la declaración BIC de la Semana Santa de Bercianos y la de Zamora. Además, somos integrantes del Consejo Sectorial de la Concejalía de Cultura. El Instituto de Estudios Zamoranos tiene que ser un referente en la sociedad y en las instituciones que actúan sobre ella.

-El ámbito del Florián es provincial. ¿Van a trabajar más en los municipios zamoranos?

-Queremos ser capaces de llevar la actividad no solo a la capital sino también a la provincia. Somos una entidad provincial. Así recientemente hemos presentado el libro "La última arquitectura de los Descalzos: el Convento de San Francisco de Fermoselle" en la propia población. Tenemos que ser capaces de llevar actividad a los pueblos y de traer lo que se efectúa en el medio rural a la capital con un rigor. Además continuaremos realizando colaboración con el Centro de Estudios Benaventanos Ledo del Pozo. En un momento en el que parece que la crisis se ha llevado por delante muchas cosas hay que darle su importancia a las exposiciones, a la lectura o a la música para conseguir una formación de corte humanista. La cultura es una referencia social.

-Usted sustituye en el cargo a Miguel Gamazo, quien ha sido el vicepresidente del Florián de Ocampo desde el año 1998 y es socio fundador de la institución.

-Solo tengo palabras de gratitud hacia él. Tenemos que darle la razón a personas que como él apostaron por la Cultura en los años 70. Debemos de agradecer la labor de él, de los presidentes y los vocales que han pasado por el centro y a los socios que hicieron una labor en unos tiempos en donde no existía el correo electrónico, entre otras facilidades que ahora tenemos.

-¿Seguirán convocando el premio de poesía Claudio Rodríguez?

-Sí apoyaremos su convocatoria así como los encuentros sobre el poeta y la publicación de las actas.

-Una de las fortalezas del centro es su biblioteca.

-Se trata de una colección bibliográfica especializa en temas de carácter local, escritos por autores zamoranos o publicados en Zamora, con el fin de reunir, conservar y difundir las publicaciones que aporten información sobre cualquier aspecto relacionado con la provincia de Zamora. Actualmente la integran casi 17.000 volúmenes entre monografías, publicaciones periódicas, material gráfico y audiovisual, situados en el Colegio Universitario. Este servicio demuestra el bagaje así como el amplio y variado trabajo realizado por centro. Cualquier persona que trabaje sobre temas de Zamora acaba pasándose por ella, bien sea por los Cuadernos de investigación bien sea por sus monografías o porque quiere consultar un artículo de uno de los anuarios.