Carlos Andrés Santos es el único artesano zamorano que participa en la muestra "Artesanía de la Máscara". Natural de Villanueva de Valrojo, Santos lleva más de veinte años realizando de forma tradicional estas máscaras como afición.

-¿Cómo comenzó su interés por la realización de estas máscaras?

-Esto va unido a la tradición que hay en mi pueblo, Villanueva de Valrojo durante los carnavales. Sentí la necesidad de volver a lo tradicional y empecé a investigar cómo las hacían antes y las hago de cartón piedra y de cuero.

-¿Cómo es este proceso de realización de las máscaras?

-En el caso del cuero es estirándolo sobre un molde que tengo de madera con la forma de la cara y dejarlo secar. Con el cartón piedra es moliendo papel de periódico añadiéndole unas colas, así se hace una pasta parecida a la arcilla y sobre otro molde se le da la forma que quieras. Luego se deja secar y se pinta. Después de secar se barniza.

-¿Cuándo comenzó a interesarse por esta tradición?

-Hace más de veinte años pero mi afición es a la máscara y yo la comercialización no la contemplo solo es un "hobby". La primera feria en la que he estado ha sido este año en un pueblo portugués.

-¿Qué importancia tiene recuperar estas tradiciones?

-Para mi tiene mucha importancia. Yo trato de enseñar a los más pequeños para que sigan la tradición. Las gentes se va marchando a las ciudades, en el pueblo ya queda menos y parece que se va perdiendo. A los niños las mascaradas les atrae bastante y les engancha. Entonces cuando vienen de fuera gracias a eso podemos mantenerla. En el caso de mi pueblo la tradición no se ha perdido nunca. Durante la dictadura, Franco lo prohibió sin embargo en mi pueblo nunca se perdieron y se seguían celebrando. Solo se perdió los tres años que duró la guerra. Lo prohibió Franco y lo que no consiguió él, parece que lo va a conseguir la despoblación.