Una ganga. Los 125.000 euros de precio inicial de un piso situado en la calle de Alfonso Peña de Zamora se quedaron 12.500 euros, cuantía que abonará a la Administración Concursal uno de los muchos postores que ayer acudió al Juzgado Mercantil de Zamora, para participar en la subasta de once inmuebles de una constructora de la capital en concurso de acreedores.

La deuda que se pretendía cubrir con la venta al mejor postor de estos bienes ascendía a 394.149,6 euros, cantidad que se correspondía fundamentalmente con el coste del piso mencionado y de otro situado en la calle de Zapatería, que se valoró en 161.741,27 euros y cuya adjudicación finalmente quedó desierta, a pesar de que su precio mínimo de salida era de 16.174,12 euros. Otra propiedad que no encontró acomodo entre las preferencias de los subasteros fue un solar, situado en el centro de la capital, en las inmediaciones del Puente de Piedra, en la misma calle que el anterior piso, de 92.361 euros.

Hasta completar los once inmuebles que conformaban el lote que se subastaba, los postores se adjudicaron cinco trasteros, uno de los tres ubicados en la calle de Colón con ofertas de cinco personas diferentes. Los otros dos están construidos en un edificio de la plaza del Maestro, también en una céntrica vía de la capital.

Una de las dos fincas rústicas que se vendió ayer está radicada en el polígono de La Hiniesta, en el paraje de San Frontis, próxima al Camino de las Lecheras, valorada en 32.000 euros, cuyo precio mínimo de salida se estimó en un 10%, al igual que el de resto de bienes, si bien no todos se vendieron a ese bajo coste.

La otra parcela rústica se localiza en la provincia de Valladolid, en el Camino de Rueda, en Medina de Campo y estaba valorada en 3.500 euros. Un garaje en la calle de Colón completó el número total de inmuebles por los que se pujó en el Juzgado, cuyo precio inicial era de 4.944,52 euros.