La composición de la candidatura al Senado ofrece, igualmente, incógnitas que la dirección provincial del PP tendrá que despejar a lo largo de las próximas semanas. Un nombre aparece como incuestionado: el de Dionisio García Carnero, que mantiene intacto su poder tanto en la sede zamorana de Víctor Gallego como el visto bueno de Génova, además de una creciente influencia a través de las relaciones entabladas por su trabajo en la comisión de exteriores y, especialmente, en Iberoamérica, donde ha centrado buena parte de su actividad como observador en procesos electorales polémicos como el de Venezuela.
Los dos parlamentarios cuya continuidad está por decidir es la del senador Jesús Sedano, exalcalde de Toro, "tocado" por el batacazo de las municipales y Carmen Luis, la senadora que ostenta el dudoso título de ser la que menos actividad ha desplegado desde que fuera elegida. La Cámara Alta podría ser un destino apetecible para hipotéticos desplazados del Congreso, como Antonio Vázquez. E incluso no se descarta la incorporación de "caras nuevas" con la presencia de mujeres con peso específico en la directiva popular, lo que incluye a la actual concejal en la oposición, Clara San Damián.
