La delincuencia tiene género masculino. Las estadísticas apuntan que un 92% de los delincuentes que acaban en los tribunales son hombres, mientras que solo 121 de las 1.043 personas detenidas son mujeres.

Lejos de lo que podría parecer, la rehabilitación no es una meta inalcanzable. A tenor de los datos últimos, el 45% de los ciudadanos que acaban sentados en el banquillo solo han tenido una causa con la justicia. En concreto, de los 801 zamoranos que acabaron procesados, y con una sentencia condenatoria, 368 era la primera vez que delinquían, mientras que 433 ya se habían enfrentado a algún procedimiento judicial en el que el juez decretó su culpabilidad.

Una vez más, los hombres superan a las mujeres en cuanto a número de penados: frente a los 690 varones condenados, solo hubo 105 mujeres, de acuerdo con los últimos datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística, relativos a 2014. Las penas de prisión ascendieron a 581, mientras que los trabajos en beneficio de la comunidad, penas que sustituyen a las multas en los delitos de tráfico especialmente, sumaron 210.

Menores

Por lo que respecta a los delincuentes menores de edad, se repiten estos mismos cánones en lo que al sexo se refiere, si bien las adolescentes delinquen en mayor medida que las que ya han llegado a la mayoría de edad, en un porcentaje que sitúa a quienes infringen las leyes en un 28%, frente al 77% de varones con edades de entre 14 y 17 años que fueron condenados en los juzgados de menores por sus actos delictivos.

El total de las infracciones cometidas por los menores sumaron 105, lo que supuso un ligero incremento respecto de 2013, cuando fueron 98 los delitos que terminaron investigados en la Fiscalía de Menores y concluyeron con una medida dictada por el juez para corregir esas conductas. Los menores que tienen entre 16 y 17 años son los que con mayor frecuencia terminan implicados en un juicio y condenados por los delitos cometidos, de acuerdo con los datos oficiales.