María del Pilar Jambrina Turiel llegó con cuatro meses a Argentina a bordo del Tucumán, mientras Luisa Jurado Turiel, también de Zamora capital arribó en otro barco, el Eugenio C un poco más mayorcita, a los seis años, con sus padres Marcos y Florentina. Son dos de las zamoranas residentes en Argentina que difícilmente podrían haber regresado nunca a su tierra natal de no ser por el programa Añoranza, que hace veinte años, en 1995, puso por primera vez en marcha la Diputación Provincial y que más tarde extendió a la Operación Raíces, destinada en este caso a gente más joven, descendiente de los zamoranos emigrados.
La presidenta de la Diputación Mayte Martín Pozo y el diputado de Cultura, José Luis Bermúdez recibieron a los 17 emigrantes y descendientes procedentes de Cuba y Argentina, nueve del programa Añoranza y ocho del Raíces. Entre las destacadas, las tres mujeres que repiten visita después de participar en la primera edicón del año 1995: Emilia Barrero Revenga, procedente de Quintanilla de Urz, María de los Ángeles Lorenzo Díaz, de Puebla de Sanabria, de donde salió con siete años y Vicenta Ramos Morán, de Vigo, que venía acompañada por el joven Ernesto Linchenat Dennes. Con ellos, Sergio Rabanillo, durante dos décadas presidente de la Casa de Zamora en Cuba que ahora dirige su hermana, María Antonia, quien se encargó de leer la carta que ésta envió a los dirigentes zamoranos significándoles la importancia que para los emigrantes tiene la cercanía de su provincia e invitándoles a los actos del centenario de la entidad, que empieza en octubre y se prolongará a lo largo de doce meses.
La emoción salía a raudales, sobre todo entre los miembros de la Operación Añoranza. Los citados y Argimiro La Fuente San José, de Justel, que llegaba acompañado de su esposa, María Elena Chana, desde la zona de Bahía Blanca, en Argentina. De Mar del Plata han venido María Manuela Garrote Paz, de Bermillo de Sayago y Segundo Jáñez Mielgo, de Vecilla de la Polvorosa. Los integrantes del programa Raíces son mucho más jóvenes, aunque están viviendo con mucha emoción la vista a la tierra de sus abuelos o bisabuelos, que hasta ahora conocían sobre todo por los relatos de sus padres. De Cuba son Ana Yulbis Ojea Turro, con bisabuelo de Cibanal (Dionisio Fermoselle Domínguez), Francisco Chauma Manso, de Arcenillas. De Buenos Aires están Lucila Denise Campastri, con abuelos de San Vitero, José Rodríguez y María Lorenzo, y Darío Ezequiel Campastri, con abuelo en Almeida de Sayago. Y de Mar de Plata completan la expedición Victoria Lasa (bisabuelos de Fuentes de Ropel), Lucía Eliana Pinuer (bisabuelos de Cerezal de Aliste) y Valentina Viejo Simoncini (bisabuela de Arcillo).
La Diputación acaba de enviar un contenedor con ropa, calzado y otros elementos de ayuda a la colonia de Cuba, con hueco también para el libro editado con motivo del centenario de la Casa de Zamora en la isla caribeña, explicó el diputado Bermúdez.
