Lograr que los visitantes se queden durante más tiempo es la gran asignatura pendiente del turismo rural de Zamora, como demuestran los datos del pasado mes de julio, conocidos ayer. Durante ese mes, uno de los más fuertes del año, el turismo rural de Zamora atrajo a 5.988 viajeros, mil más que un año antes, cuando vinieron 4.986. Y fue gracias al turismo nacional, lugar de procedencia de 5.741 visitantes, frente a los 4.632 de un año antes. Los extranjeros, sin embargo, bajaron un 30%: de 354 en julio de 2014 a 247 el mismo mes de 2015. Estos buenos datos, sin embargo se vienen abajo con las cifras de pernoctaciones: 11.735 frente a 12.979 del año anterior. Los españoles contrataron 11.103 noches el pasado julio frente a las 11.567 de un año antes, y los extranjeros tan solo 632, frente a las 1.412 de doce meses antes.

La conclusión es que, sea por la crisis o por otras circunstancias, la estancia media de los usuarios del turismo rural ha sido muy baja en la primera mitad del verano. De media, cada turista ha estado 1,96 noches en Zamora, frente a las 2,60 del año anterior. Es el dato de explica cómo habiendo más turistas, se han vendido menos pernoctaciones.

Con respecto al año anterior, además existen cuatro establecimientos menos de turismo rural en la provincia de Zamora. Son 207 las casas que funcionaban el pasado mes de julio, aunque con más plazas que el año anterior, (2.350 frente a 2.315).

El grado de ocupación bajó del 17,96% de las plazas en julio de 2014 al 16,09 del mismo mes este año. Si se tienen en cuenta solo los fines de semana la ocupación es más alta y llega al 26,4% de las plazas, si bien la cifra es mucho menor que la registrada en julio del año pasado, cuando se alcanzó el 34,62%. Por habitaciones, la ocupación fue del 19,19%, dos puntos por debajo de que ocurrió hace un año. Por fortuna, los empleos no se han resentido por el descenso de pernoctaciones y se estima que el turismo rural ocupa en Zamora a 333 personas, tres más que en el mismo mes que el año anterior.

El turismo rural de Zamora ocupa un lugar discreto en la región. Los alojamientos que captan más visitantes son los de Ávila, con más de diez mil en julio, seguidos de los de Segovia, que superan los 8.600 y Soria, con más de siete mil. Zamora, con 5.741, superó a Burgos, con menos de 4.700, Palencia, que apenas pasa de los tres mil y Valladolid, que no llega ni siquiera a esa cifra.