Los motivos más frecuentes de consulta a este servicio de atención de urgencias pediátricas son generalmente sobre medicación, problemas como fiebre, síntomas digestivos, diarrea, tos o trastornos de la piel. La franja de edad de los pacientes que han requerido este servicio oscila entre los mayores de 2 años, que suponen un 43% y los del tramo entre 3 y 6 meses, con un 7,2%. Los profesionales que atienden estas llamadas son enfermeras ubicadas en el Centro Coordinador de Emergencias Sanitarias (CCU), preparadas específicamente para atender problemas de salud frecuentes en la infancia.

El teléfono, que es el 900 222 000 y es totalmente gratuito. La consejería enfoca este servicio especialmente en aquellas situaciones en las que una rápida recomendación profesional proporciona tranquilidad a los padres, al mismo tiempo que contribuye a mejorar la utilización de los servicios públicos sanitarios.