Los dos grupos políticos que gobiernan en coalición en la actualidad y que compartían la oposición en vida del frustrado proyecto del edificio municipal -Izquierda Unida y PSOE- no dudan en señalar a una persona como responsable del legado final: el excalcalde Antonio Vázquez. El actual regidor, Francisco Guarido, sostiene que detrás de la operación y su saldo posterior están "todos los que levantaron la mano en aquel pleno (año 2006) y que después fueron premiados: Antonio Vázquez, Fernando Martínez Maíllo, José Luis González Prada y Alberto Castro", al tiempo que recrimina a González Prada su actitud de "gallito" por la reacción hecha pública al conocerse que el Ayuntamiento debería pagar 4,2 millones de euros.

En las filas socialistas, el secretario provincial, Antonio Plaza, concierta con Guarido en que "no tenemos ni edificio ni dinero". Su compañero y teniente de alcalde, Antidio Fagúndez, sostiene que el responsable es "quien firmó: Antonio Vázquez" y añade que "en política, las responsabilidades solo se asumen de una manera", en referencia a una hipotética dimisión como parlamentario. "No creo que ningún zamorano piense que Vázquez debe seguir en activo", añade Fagúndez.