La pérdida de 4,2 millones de euros para las arcas municipales en el caso del edificio municipal no ha terminado de sentar nada bien a los ciudadanos, que consideran esa cifra un dinero importantísimo con el que se podrían desarrollar multitud de iniciativas. Servicios sociales, apoyo a emprendedores, planes de juventud u obras en los diferentes barrios de la ciudad son algunas de las cuestiones que los encuestados han considerado prioritarias y para las que hace falta una financiación que nunca llega. En el capítulo de pedir responsabilidades, división de opiniones entre quienes creen que hay que exigirlas y quienes opinan que no serviría de nada.

«Esto es lo de siempre. Tenemos un problema, quien lo causa queda en el olvido y pagamos el pato todos los ciudadanos». Es la opinión de José Berodas, un joven experto en el sector audiovisual que considera que el dinero perdido estaría mejor invertido en ayudas a la juventud. «Es imprescindible fomentar el empleo juvenil. La gente tiene que irse de esta ciudad por falta de oportunidades y luego vemos cómo se tira el dinero de esta manera», indica indignado este ciudadano.

El malestar entre los encuestados es común. Aunque no así el afán de pedir responsabilidades. «¿Para qué?», se pregunta María Rosa Encinas. «Siempre estamos pidiendo responsabilidades y nunca nadie va a admitir esa responsabilidad. En mi opinión, prefiero actuar a pedir responsabilidades», opina esta zamorana. Un discurso similar al de Alejandro Lorenzo, que trabaja como camarero. «Es estúpido, no va a servir de nada», analiza. Al igual que Agustín Ferrero, un zamorano jubilado. «Pedir, se puede. Pero contra el vicio de pedir, la virtud de no dar. Y como esta gente es muy virtuosa, pues mejor no pedírselas», explica.