La empresa zamorana Dajusa, firma puntera en el sector de los embalajes y los envases, ha experimentado recientemente un notable crecimiento que ha derivado en la apertura a diferentes mercados como Francia o Portugal. Todo ello, gracias al apoyo de Iberaval y su dinámica colaborativa con las firmas de la provincia. Sin embargo, Dajusa no quiere parar y por ello se está preparando para fortalecer su posición en el mercado europea. Esta es la realidad de una empresa radicada en la misma plaza de Cristo Rey y que paso a paso ha logrado colocarse como referencia internacional dentro de su sector.

Dajusa comenzó su andadura en el sector de los embalajes y los envases hace ya trece años. Fue en el año 2002 cuando seis amigos decidieron embarcarse en una ambiciosa aventura empresarial que ha ido creciendo con el paso del tiempo. La compañía, cuya sede central se encuentra en la plaza de Cristo Rey, comercializa principalmente dos productos: sacos de rafia y "big bags" (grandes bolsas) de polipropileno, un embalaje de última generación que va ganando enteros en el ámbito de la distribución y la logística.

David Alonso, gerente de Dajusa, explica las claves del éxito de esta empresa. "El valor añadido que nosotros aportamos es la atención al cliente y una respuesta exacta a lo que necesita para su negocio", analiza. Esta es la razón, añade, por la que han optado por desplegar una red de comerciales por toda España con el objetivo de conseguir un servicio más personalizado.

El pasado curso 2014, Dajusa experimentó un notable crecimiento al conseguir abrirse a más mercados, además de exportar a Países como Francia o Portugal. Actualmente, esta empresa zamorana mantiene diez puestos de trabajo indefinidos. El objetivo, a corto plazo, es fortalecerse en el mercado europeo, aunque aseguran que ven oportunidades de expansión en América del Sur. "Sin embargo, no queremos crear un gigante con pies de barro, sino afianzar la empresa con una estructura sólida", apunta Alonso.

Las nuevas necesidades de la empresa y el crecimiento de las exportaciones han animado a los socios a buscar financiación para expandir la actividad. Y es ahí donde entró en juego Iberaval. "Queríamos incrementar nuestra línea de comercio y habíamos oído hablar bien de Iberaval a otras empresas zamoranas, por eso nos decidimos", apunta.

Las facilidades que ofrecía la sociedad de garantía y la fructífera colaboración en otros proyectos fueron los principales motivos que empujaron a los socios a solicitar esta financiación alternativa, dirigida a atender sus necesidades de circulante. Los planes de futuro de Dajusa pasan ahora por mejorar aún más sus procesos de innovación y atención a sus numerosos clientes. Pero, en especial, su reto a medio plazo tiene un nombre: llevar sus sacos de rafia y "big bags" desde Zamora, al resto de Europa.