Los despachos de la Policía Municipal situados en la planta baja han tenido que ser desalojados al producirse una filtración de agua originada por la dilatación en los materiales. Los trabajadores de estas dependencias en el Ayuntamiento viejo han sido reubicados mientras duran las tareas de adecuación de las salas, que se prolongan desde hace varios días atrás. Los operarios municipales se han servido de una bomba de achique y están trabajando para la puesta a punto lo antes posible. El objetivo es que no se vuelvan a producir este tipo de situaciones durante el tiempo que le queda a la Policía Municipal en el edificio de la Plaza Mayor y tenerlo perfectamente arreglado de cara al futuro.

Las filtraciones de agua se produjeron en dependencias de la Policía Municipal la semana pasada. Unas brechas en el suelo de la planta baja hicieron brotar agua del subsuelo, zona de bodegas de la calle Balborraz. Los trabajadores que allí operan tuvieron que ser reubicados, según han confirmado a este diario fuentes municipales.

Los arreglos en la planta baja ya han comenzado y se ha procedido a levantar el solado con el objetivo de instalar una junta de dilatación que soporte las contracciones o expansiones de los antiguos materiales del edificio. Una obra necesaria para el buen mantenimiento y el futuro del viejo Ayuntamiento de la capital.

La problemática de las filtraciones se produce en un momento en que la Policía Municipal esta a la espera de trasladarse al edificio del Banco de España, donde el Ayuntamiento está pagando un alquiler de 7.500 euros al mes, un total de 90.000 euros al año. Desde el Consistorio se espera que este traslado de las dependencias municipales a la rotonda de Cristo Rey se pueda realizar, como muy tarde, durante el próximo verano del año 2016, en función de cómo avancen las obras.