La diputada nacional por Zamora Mar Rominguera propuso ayer que las medidas aprobadas para las zonas de montaña se apliquen también en toda la provincia, ya que se trata de un territorio sumamente afectado por la despoblación. Desde luego, en caso de llevarse a cabo, sería un auténtico plan de choque pero de verdad. Porque además de las medidas fiscales de rebajas de impuestos para residentes y empresas ya mencionadas, incluye otro paquete de estrategias económicas. Entre ellas, una "discriminación positiva en políticas sociales y demográficas", la dotación económica suficiente para "garantizar la Ley de Desarrollo Sostenible del Medio Rural", la apuesta por las cooperativas de crédito y las sociedades de capital riesgo para impulsar la actividad económica, el apoyo a proyectos "estratégicos generadores de empleo a través de sociedades mixtas de capital público-privado", el impulso de empresas de actividades tecnológicas, "hacer valer el turismo relacionado con el patrimonio natural y cultural de estos territorios" y finalmente un apartado que resulta llamativo, sobre todo tratándose de zonas de montaña: "Potenciar la formación, la innovación y el talento a través de escuelas de negocios, universidades y congresos profesionales". Otras medidas consisten en simplificar los trámites administrativos, considerar la actividad de los Grupos de Acción Local para apoyar las iniciativas de desarrollo y fomentar la cultura del emprendimiento.