Isabel C.T. está de vacaciones en Zamora. Vive en Madrid normalmente y el pasado jueves se acercó a comprar a una tienda de Santa Clara. Llevaba el carrito de un niño, donde dejó el bolso. Lo perdió de vista un momento y al volver a mirar se dio cuenta que le la cremallera estaba entreabierta. Se temió lo peor. Echó un vistazo dentro del bolso y de percató de que le habían levantado el billetero. "Tenía un iphone en el bolso, pero ni lo tocaron". No llegó a salir del establecimiento, cuando la víctima de la sustracción se percató de que su cartera estaba sobre una de las repisas de la tienda, con todas las tarjetas, pero sin el dinero. "Un poco más tarde, oí comentar a otra señora que también le habían robado la cartera". Esta ciudadana no denunció el hecho en Comisaría porque "es prácticamente imposible imputar el hecho a ninguna persona". Efectivamente, los robos de carteras en tiendas y supermercados son relativamente habituales en la capital.
El subdelegado del Gobierno, Jerónimo García Bermejo, asegura desconocer que se esté produciendo ningún incremento excepcional de este tipo de hechos o que haya alguna banda especializada haciendo de las suyas. En todo caso, aconseja a las víctimas denunciar este tipo de hurtos porque de otra forma la Policía no puede conocerlos.
Los últimos datos del Ministerio del Interior, correspondientes al periodo entre enero y marzo, apuntan a un ligero incremento de los hurtos en la capital, de 173 a 179 en el primer trimestre del año, un aumento del 3,5% en principio no demasiado significativo. En la provincia, en cambio, sí han aumentado notablemente los hurtos, de 291 a 328 en el mentado periodo, lo que supone un incremento relevante, del 12,7%.
