"En el mundo de la investigación, vivir en otros países está a la orden del día". Victoria Ferrero es un buen ejemplo de ello, con una larga experiencia en el extranjero, que le ha llevado a vivir en lugares tan dispares como Santiago de Chile, Portugal o Pietermaritzburg, en Sudáfrica. La zamorana reconoce que la situación de sus colegas en España "es crítica" y considera que las oportunidades que existen para quedarse en el país "son cada vez más escasas en términos de plazas en universidades y centros de investigación. Además, la preparación de los investigadores españoles es excelente, lo que aumenta la competencia a la hora de conseguir una plaza", razona. A pesar de la situación, la zamorana no aprecia que los investigadores sean más valorados en el extranjero. "Es simplemente que ese aprecio no da de comer y las oportunidades de trabajo y financiación de proyectos son mayores en otros países". Lo que sí considera es que en el país "no se aprecia suficientemente la investigación como profesión, al menos como se hace en otros sitios, como en Norteamérica. Esto puede deberse al desprestigio en general del sistema superior de enseñanza". Pero la tierra tira y en su caso particular, confiesa que su sueño es regresar a España, "o al menos cerca", pero también es consciente de que se trata de un anhelo difícil de alcanzar. "De momento, el próximo año estaré en Vigo, después ya se verá", concluye.