La seguridad en las carreteras de la provincia es una prioridad que se incrementa en verano y por ello todos los efectivos de la Guardia Civil de Zamora estarán presentes durante la campaña especial de la DGT. En total, 120 agentes y 60 funcionarios velarán por la seguridad de los conductores desde mañana viernes, que comienza esta operación. "Se trata de todo el dispositivo hábil del subsector de Tráfico", indicó Jerónimo García Bermejo.

Desde la Subdelegación del Gobierno se calcula que habrá un total de 1.040.000 desplazamientos por las carreteras de la provincia, repartidos en 490.000 en julio y 550.000 en agosto. La mayor intensidad de tráfico en esta operación serán la A-52, A-6, A-62 y A-66, además de en la Nacional-631 "como vía de comunicación entre la capital y toda la zona de influencia del lago de Sanabria", explicó el subdelegado del Gobierno. "El kilómetro 258 de la A-66, en sentido Madrid, en el término de Castrogonzalo, suele haber retenciones ocasionales y se convierte en uno de los puntos más conflictivos de la provincia", añadió García Bermejo.

En el verano del pasado año las carreteras zamoranas registraron 32 accidentes con víctimas: siete de ellas mortales, otras siete con hospitalización y 32 leves. "Nuestro reto es el de accidentalidad cero y por ello el trabajo va orientado en ese sentido", subrayó el subdelegado, quien explicó que algunas de las medidas adicionales de seguridad para esta época del año, "que otorgan fluidez a las carreteras" son la creación de carriles reversibles y adicionales, paralización de las obras y diseño de itinerarios alternativos. García Bermejo solicitó también especial atención a la circulación en las vías secundarias "donde los accidentes se incrementan".

Por último, el subdelegado anunció que durante este verano también se pondrá en marcha campañas especiales, tanto para comprobar las condiciones del vehículo, de control de velocidad y de control de tasa de alcohol y detección de drogas.