Un año más, los vecinos de Las Vegas ven su vida afectada por el polen de los chopos, cuyas pelusas, altamente inflamables, anegan sus patios, viviendas y garajes. "No se puede estar en las terrazas de los bares y los garajes están llenos de pelusas, con el consiguiente riesgo de incendio", denuncia Esteban Pérez, vecino de la zona. El año pasado, un vecino elevó un escrito pidiendo ayuda al Ayuntamiento para que hiciera lo posible por paliar el problema, que trastoca su vida diaria durante alrededor de un mes y medio, pero el grupo municipal "no hizo nada" según cuenta Pérez.

Los vecinos reclamen que se poden los árboles que generan las pelusas, los chopos "hembra" que, aunque no producen alergia per se -en contra de lo que a veces se cree-, generan molestias en la zona, en la que este tipo de vegetación está muy presente.