Zamora es la provincia con mayor número de incumplimientos por calificación de agua no apta, con diez casos, seguida de Ávila y Salamanca, ambas con ocho deficiencias de este tipo, según los datos que figuran en el informe sobre la Calidad de las Aguas de Consumo Humano de 2014 que acaba de hacer público la Junta de Castilla y León. Además, en otros nueve casos se detectó agua "apta con no conformidad", también en este aparado la cifra más alta de la Comunidad, si se exceptúa Valladolid.

Se trata del resultado de las determinaciones analíticas para detectar la presencia en las captaciones subterráneas de los contaminantes que más problemas están provocando en la falta de potabilidad de numerosas poblaciones de Zamora. En concreto en la provincia se llevaron a cabo 46 determinaciónes analíticas de arsénico en captaciones y redes, 104 de fluoruros, 95 de cloruros, 90 de sulfatos, 96 de sodio, 95 de hierro y 38 de manganeso. En total, 523 determinaciones en captaciones y 42 en redes de abastecimiento. Salamanca, Ávila y Zamora fueron las provincias donde se ha realizado el mayor número de análisis en captaciones, sumando entre las tres más de la mitad del total realizadas en la Comunidad.

Las tomas de muestras de aguas superficiales midieron, entre otras cosas las microcistinas (nutrientes en el agua). De las siete muestras analizadas en Zamora no se encontró exceso de microcistinas en ningún caso. En cambio sí que se encontraron incumplimientos por exceso de trihalometanos, en concreto en cuatro de las trece muestras recogidas. Este tipo de análisis se realiza en toma de muestras de agua en las zonas de abastecimiento de más de 500 habitantes, por cuyas redes de distribución discurriese agua de origen exclusivamente superficial y en las que el método de desinfección fuera mediante el empleo de cloro. Es el caso, por ejemplo, de la capital o Benavente. Los trihalometanos se generan por una reacción de la materia orgánica y el cloro y son malos para la salud.

El informe sobre la Calidad de las Aguas de Consumo Humano se trata de un completo estudio en el que se resume la actividad inspectora de las administraciones y en el que se constata cómo la provincia de Zamora es una de las que más problemas tiene en relación con el líquido que sale por el grifo en los hogares. Uno de los programas de la Junta mide, por ejemplo, la cloración inicial de las redes de abastecimiento. El resultado es que Salamanca es la provincia con mayor porcentaje de clorimetrías iniciales con resultado adecuado, con el 94,7%, lo que la convierte en la provincia con las redes mejor desinfectadas de la Comunidad, en la primera visita de inspección. Por otra parte, Zamora y Ávila, con el 79,3% y 80,5% respectivamente de sus clorimetrías adecuadas, son las provincias donde se han detectado mayores deficiencias en la desinfección, en la inspección inicial. Eso si, en todos los casos se tomaron medidas y se resolvieron las deficiencias.