"Entrará en servicio cuando me digan los técnicos, porque la ministra no decide cuando se ponen las cosas en marcha. Ya está todo el dinero consignado y está avanzada la obra". Así respondía la ministra de Fomento cuando se le preguntaba por la puesta en servicio de la línea de alta velocidad a Zamora. Aunque el pasado mes de octubre durante una visita a las obras del AVE en la localidad gallega de La Gudiña, que llegaría en junio a la capital zamorana, Pastor prefiere aguardar a juicios técnicos antes que aventurar una fecha concreta: "Cuanto antes, mejor", afirmó, subrayando que toda la obra está en plazo. Cuando llegue la línea del AVE el tiempo de viaje se reducirá en media hora entre Madrid y Zamora. En una segunda etapa, cuando todos los sistemas estén a pleno rendimiento el viaje a la capital de España se hará en hora y cuarto. Aseguró Pastor que en los dos últimos años el tráfico de viajeros por ferrocarril desde Zamora se ha incrementado de forma notable, y espera que con la alta velocidad mejore todavía más, para lo cual prometió que las frecuencia de viaje serán las adecuadas. En el tramo de la estación se están invirtiendo 35,5 millones de euros: 28,4 para la plataforma, 2,5 para la remodelación de la estación en la primera fase, casi 3,7 en el cambiador de ancho tipo Talgo y 0,8 en la remodelación interior de la terminal.
