El Grupo de IU insiste en que se subroguen los trabajadores de la Estación de Autobuses interurbanos, como ya exigió cuando se elaboró el pliego de adjudicación del servicio, a la que se presentaron la actual empresa, con un canon para pagar al Ayuntamiento de Zamora de 20.000 euros; y la UTE Castaño-Ruiz, con uno de 105.000 euros. Entonces se denegó «con el argumento de que la normativa estatal impedía esta circunstancia, si no lo contemplaba el Convenio colectivo», expone el portavoz municipal de IU, Francisco Guarido. La coalición de izquierdas recuerda que «el Estatuto de los Trabajadores, en el caso de los contratos de prestación de servicios públicos, sí contempla la obligación del mantenimiento de los puestos de trabajo adscritos al servicio», cuando solo «exista una sucesión de empresas, como es el caso». También se retrotrae a las declaraciones de la alcaldesa, Rosa Valdeón, cuando dijo que «su objetivo es el mantenimiento de empleos en las concesionarias».