El presidente del Partido Popular de Zamora, Fernando Martínez Maíllo, justifica la futura ley del aborto del ministro Alberto Ruiz-Gallardón en que su partido «lo planteó en el programa electoral en unos términos parecidos a los de 1985». No obstante, ha pedido «respeto» para quienes han expresado «una opinión particular contraria» a la propuesta del Ministerio de Justicia, como en el caso de la alcaldesa Rosa Valdeón, porque «es un tema muy complejo» en el que «intervienen muchos factores».

Las palabras del responsable de los populares zamoranos llegan después de que su compañera de partido, la alcaldesa Rosa Valdeón, se haya pronunciado claramente en contra de una parte del nuevo texto, el que excluye de los tres supuestos actuales para el aborto el de la malformación del feto. «Es un tema muy complejo porque hay que conjugar el derecho de la mujer con el derecho del no nacido y donde los conflictos éticos y personales influyen mucho», afirma Maíllo.

Para el responsable de la Diputación «no hay ninguna ley del aborto que contente a todo el mundo, pero también es verdad que el PP lo planteó en el programa electoral con unos términos parecidos a los de 1985». Martínez Maíllo asegura, no obstante, que Rosa Valdeón «no ha hablado de una negativa a la ley de Gallardón, sino a un aspecto muy concreto, el de la malformación del feto». Sobre este punto, el líder del PP en Zamora afirma que «es un tema complejo donde yo prefiero esperar a los pronunciamientos definitivos y pido respeto a quienes han expresado una opinión particular». De hecho, Maíllo se interpela «a sí mismo» como futuro padre y confiesa que «en una situación como la que ha señalado la alcaldesa, ni yo mismo sabría qué hacer, aunque el Gobierno tratará de legislar lo mejor».

De cualquier modo, el máximo responsable de la Diputación ha matizado que la ley de Alberto Ruiz-Gallardón «es solo una propuesta» que «tiene un trámite parlamentario por delante». Martínez Maíllo espera que «se haga lo mejor» sin olvidar «nuestro programa electoral» siempre «respetando la opinión particular de las personas que se han pronunciado en contra».

Entretanto, crece la contestación interna en el Partido Popular sobre la futura ley. Ayer mismo y después de las críticas públicas de Valdeón, fue la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, quien se desmarcó de la propuesta de Ruiz-Gallardón admitiendo que prefiera la actual normativa de plazos.

Tras dejar clara su crítica, la alcaldesa Rosa Valdeón, que forma parte de la directiva nacional del PP, ha avanzado que expresará su postura «a título personal» al Ministerio de Justicia. Para Valdeón supone «una incongruencia» que en el sistema sanitario español, «de lo mejor que existe en el mundo», se hagan pruebas para ver el estado del feto y, en el caso de detectar algo, no se ofrezca la posibilidad de decidir si se quiere interrumpir el embarazo.