Más de un año después de aprobar en el pleno del Ayuntamiento la instancia a la Junta de Castilla y León para iniciar el expediente de la declaración BIC del Puente de Piedra, la Administración regional estudia todavía su catalogación a través de un inventario que los técnicos elaboran para próximas «declaraciones singulares de puentes de Castilla y León, el de Zamora entre ellos», explicó ayer el director general de Patrimonio Cultural, Enrique Sáiz. En cualquier caso, el responsable regional puntualizó que «no hay que olvidar que la Ley dice que un BIC es un bien que tiene una dimensión relevante más autonómica». No obstante, la declaración «se está estudiando en el marco de unos estudios basados en una catalogación exhaustiva con la que contamos de todos los puentes históricos de la comunidad».
La catalogación del Puente de Piedra como BIC implicará a la Junta en la conservación del viaducto, sometido de manera continuada a actuaciones superficiales en aceras y pavimento para parchear el puente. No obstante, su rehabilitación integral y la decisión sobre su futura peatonalización tendrá que esperar a la puesta en funcionamiento del nuevo puente sobre el río aguas abajo. La posibilidad de cerrarlo al tráfico o incluso la opción de hacerlo de un solo sentido son algunas de las alternativas barajadas.
