El esfuerzo y el tesón siempre tienen recompensa. Y si no que se lo digan al zamorano Alberto Álvarez, que ha logrado el reconocimiento de la Universidad de Salamanca por haber obtenido el tercer mejor expediente de la titulación de Administración y Dirección de Empresas (ADE) de la última promoción.

Con 22 años, el joven se siente «muy orgulloso» del galardón obtenido y reconoce que ha sido el resultado de un «sacrificio tanto a nivel académico como futbolístico, ya que han sido muchas las jornadas dedicadas al Zamora CF», asegura. Y es que además de estudiante, Alberto Álvarez ha explotado su faceta deportiva en el equipo filial rojiblanco, aunque espera pasar a formar parte de la primera plantilla, con quien se entrena en alguna ocasión.

A pesar de la dedicación que presta al «deporte rey», el joven es consciente de la importancia de no dejar de lado la formación académica, y aunque afirma que «ha sido complicado compaginar ambas cosas y viajar todos los días a Salamanca y regresar para entrenar», subraya que en su orden de prioridades los estudios están en primera posición. Así, y aunque no despega los pies del campo, el zamorano estudia en la actualidad un curso de asesoría de empresas tras dedicar cuatro años al grado de ADE. El fútbol es su pasión y un posible futuro nada desdeñable para Alberto, que sin embargo es consciente de que si le ofrecen un contrato laboral relacionado con su titulación, «no están las cosas como para rechazar ofertas de empleo», comenta.

Junto a otros dos compañeros de titulación, Alberto Álvarez recibió el reconocimiento de la Universidad de Salamanca de manos de Juan Antonio Hidalgo Acera, vicepresidente del grupo Globalia.

Un nuevo año, con nuevos retos e ilusiones se perfila en el horizonte de este zamorano, que en una mano sostiene la calculadora y el bolígrafo, mientras que con la otra controla un balón. Dos visiones de futuro que hasta ahora han congeniado sin problema.