Aunque todavía no existe confirmación oficial por parte de la delegación de la Junta, desde Azehos, organización hostelera que es la principal organizadora de la Nochevieja Universitaria del próximo jueves, apuntan que obtendrán la autorización formal para que los bares y discotecas que participan en la organización del evento puedan ampliar en dos o tres horas más su horario de apertura durante esa noche.

Alfonso Gómez, secretario de Azehos, apunta que «aunque todavía no lo tenemos en negro sobre blanco, entendemos que la Junta ha dado el visto bueno a la petición» de ampliación de horarios, que «debería» haberse comunicado formalmente durante la jornada de ayer. Alfonso Gómez apunta que el Ayuntamiento «ha elaborado un informe favorable» que respaldaría esta petición.

Gómez apunto a la imperiosa necesidad de que se permita abrir más horas a los bares para que puedan, al menos, costear el dinero destinado a la organización del evento. Desde Azehos recuerdan que todo el gasto del despliegue de la fiesta de la semana que viene está sufragado por los bares y establecimientos que han decidido participar, que son «prácticamente todos los del entorno de la Plaza Mayor y de la calle de Los Herreros». Por tanto, la mayoría de los lugares de ocio de la zona podrán abrir hasta, al menos, las 6 de la mañana del viernes siempre y cuando se confirme la autorización de la Junta.

Salvo cambio de última hora en este aspecto, que según los organizadores podría suponer la suspensión del evento porque muchos bares se negarían a costear la fiesta (apuntan que no obtendrían los ingresos mínimos suficientes), la celebración comenzará antes de las 9 de la noche con un desfile de moda por las calles de la ciudad. A su finalización, los participantes quedarían convocados en la Plaza Mayor, donde se instalará un escenario y equipos de sonido, además de contratarse a un disk-jockey, para que la fiesta siga hasta las 12 la noche, momento en el que se recreará la toma de las uvas típica de Nochevieja.

Esta será la cuarta Nochevieja Universitaria que se celebre en Zamora, una «tradición» que empezó en 2009 ante los problemas que tuvo Salamanca para acoger esta celebración. Desde la organización siempre han destacado la gran repercusión que tiene esta fiesta en la economía de la ciudad, que supera «ampliamente» los factores negativos que pudiera haber. Desde Azehos indican la gran necesidad de este tipo de eventos para dinamizar un sector, el hostelero, que se ha visto muy afectado por la crisis.