La Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza (FSIE), organización sindical mayoritaria en el sector de la enseñanza concertada y privada en la capital, no llevará a sus afiliados a la huelga del próximo día 14 de noviembre, convocada por USO, UGT y CC OO.

El colectivo afirma que esta decisión no impide que se sigan manifestando en contra de los recortes, «especialmente de los efectuados en educación», pero entiende que hay otros mecanismos de protesta que no supongan un nuevo esfuerzo a los trabajadores «que han perdido en estos dos últimos años un elevado porcentaje de su poder adquisitivo», se pronuncian.

Según su opinión, «la huelga está vinculada a la petición de un extraño referéndum que no compartimos. Lo que se pretende con esta consulta es algo muy alejado de la defensa de los intereses de los trabajadores», explican los afiliados y delegados del sindicato, que consideran que ésta es una huelga «de carácter político», por lo que suman una razón más para no secundar el paro.

Además de comunicar que para ellos la huelga no es una opción, desde FSIE aseguran que «ni siquiera la mayoría de delegados sindicales y afiliados de las organizaciones convocantes van a participar, porque discrepan de la decisión de sus cúpulas», explican a través de un comunicado.