Apenas 250 edificios de más de 40 años de los casi 2.500 censados en la capital han pasado la correspondiente ITE, que entró en vigor en Zamora hace más de seis años. El proceso, en vías de automatización, es obligatorio para todos los titulares y la misión de la institución municipal es certificar que el chequeo se ha llevado a cabo tras recibir la información correspondiente de los técnicos. La inspección se ejecutará de manera progresiva tras la implantación definitiva de la fórmula de actuación y está prevista desde hace tiempo una bolsa de técnicos en Zamora para la necesaria Inspección Técnica de Edificios, comúnmente denominada ITV de viviendas antiguas.

La tramitación para la inspección se presentará por el propietario o su representante legal en el registro del Ayuntamiento junto a la solicitud de inscripción en la base municipal de datos de inspecciones técnicas. Los objetivos de la medida pasan por garantizar la estabilidad del edificio, tanto su durabilidad como su seguridad, así como evitar reclamaciones de terceros ante hipotéticos daños derivados del mal estado del edificio. Además, la medida persigue mantener o alcanzar las condiciones de confort y reducir los consumos energéticos. Otro de los objetivos es evitar la depreciación de los edificios manteniendo o aumentando su valor de mercado de cara a mejorar las expectativas de alquiler o venta, ya que una Inspección Técnica de Edificios favorable constituye una garantía para vendedores, compradores o arrendatarios sobre el buen estado del inmueble en cuestión.