La Joven Orquesta Sinfónica de Zamora cuenta las horas para presentarse ante el gran público zamorano en el concierto que tendrá lugar a las siete de la tarde de mañana en el templete de la Marina. Pese a que ya dieron algunos recitales en años anteriores en diferentes puntos de la provincia, el proyecto se ha vuelto a retomar en este año 2012 y lo ha hecho con fuerza. Entre 35 y 40 músicos de todas las edades, aunque principalmente niños, tienen pendiente una cita con la música y pretenden no defraudar a quienes decidan acudir a verlos.

La historia de esta orquesta se remonta al año 2004, aunque el inicio fue bastante difícil, como explica el vicepresidente de la asociación que da soporte a la Orquesta, Javier Álvarez. «Por razones de falta de dirección musical la orquesta dejó de trabajar tras su fundación, pero ahora hemos retomado el proyecto y tenemos una muy buena base musical», sostiene.

Es por ello que el grupo, en el que hay desde niños de 10 años hasta personas con unos estudios sólidos de música, quiere establecerse dentro del panorama de orquestas sinfónicas de la comunidad para poder llegar a equiparse «con cualquier otro grupo de este estilo». afirma Álvarez.

Para conseguirlo a medio-largo plazo, ensayan bajo la batuta de Juan José Aguado Baena, persona ligada a la música en Zamora desde hace más de 20 años. «Con su trabajo, Juan está haciendo un regalo tremendo a Zamora, a la orquesta y a los músicos zamoranos que han trabajado con él», explica Álvarez.

Cabe destacar que el concierto que ofrecerán mañana estos jóvenes zamoranos será simplemente un «aperitivo» de lo que se podrá ver a finales de año en el Teatro Principal. «Estamos ultimando una puesta de largo con todas las de la ley y queremos que toda la gente a la que le guste lo que vea en el templete se anime a seguirnos en nuestra siguiente cita, la importante, que será en un marco inmejorable gracias al Ayuntamiento», mantiene.

De este modo, han preparado un gran equipo de sonido en colaboración con diferentes entidades para lograr enganchar en el día de mañana a la mayor cantidad de gente posible. «Hay que darlo todo, porque será un concierto donde la gente prácticamente no vea a los músicos ni viceversa», explica.

El repertorio escogido para el acontecimiento es Concierto Grosso en re mayor de Corelli y la banda sonora de Piratas del Caribe. Dos sinfonías que, aunque diferentes, están destinadas a todos los públicos. «Queremos que la gente disfrute con nosotros y por eso vamos a intentar llevar música digerible para todo tipo de oyente», sentencia Álvarez.