«La defensa de la libertad, de la verdad y de la dignidad» son principios presentes en toda la obra literaria de Miguel de Cervantes según el experto Leandro Rodríguez quien ha reunido ocho itinerarios extraídos de la producción cervantina en «Cervantes caballero por Europa».

El investigador ha diseñado las rutas basándose en pasajes y referencias de las obras de Cervantes así como en «las circunstancias geográficas, históricas, sociales, económicas y culturales». Una de ellas recorre la comarca zamorana de Sanabria, otra transcurre por Salamanca, Valladolid y Soria, mientras que otra incluye Lisboa, Badajoz, Cáceres, Talavera de la Reina, Valencia, Albacete y Cartagena, entre otros lugares, a lo que se unen caminos por Francia, Inglaterra, Italia, dos de la cuales recorren Chipre, Malta y Grecia, Dinamarca, Islandia, Túnez o Argel.

«Cervantes, un hombre universal, no se identifica con la cultura europea» y «pone en práctica enseñanzas que tiempo después serán articuladas en las Declaración Universal de los Derechos del hombre», argumenta Rodríguez que estima que Miguel de Cervantes «conoce las tierras, los mares y las personas de Europa por donde estuvo». «Es una evidencia que Miguel de Cervantes nació en Cervantes de Sanabria y como dice en el Quijote este personaje "es su semejante", por lo que tenemos que analizar aquellos lugares que el escritor describe», precisa Leandro Rodríguez, cuyo último libro ha prologado José Luis González Valvé. «A él se debe este volumen, ya que un día me dijo que interesaría que estudiase las relaciones de Cervantes y Europa», atestigua el autor a quien el filólogo Enrique Fontanillo presentó como «un hombre de Derecho que busca que se haga justicia con Cervantes y su tierra. Todo lo argumenta con argucia policial que pone nerviosos a los literatos».

«Cervantes caballero por Europa», editado por Semuret, cuenta con una serie de anexos en los que Rodríguez acerca a las influencias de la literatura cervantina en publicaciones del siglo XVII. Ya en 1608 «El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha» estaba traducido al francés, mientras que escritores del Reino Unido, Irlanda, Estados Unidos y Canadá se inspiran en Cervantes gracias a las traducciones que comenzara a efectuarse en 1640 de las «Novelas ejemplares» por el secretario de la embajada inglesa en España, James Mabbe, «gran amigo de Shakespeare». El experto sanabrés ahonda en que la relación de Cervantes con Portugal es amplia y hasta «es posible que Camões y Cervantes se conocieran». Además, Leandro Rodríguez subraya que Cervantes «tuvo interés por conocer y participar en la cultura china tal y como le manifestó a su amigo el conde de Lemos en una carta. Le indicó que quería que en un colegio de enseñanza de castellano se leyera El Quijote».