Con humildad y sencillez, Isabel García Prieto acude a las elecciones de mañana para «aportar mi granito de arena». Impresionada por la envergadura del proceso, García Prieto propone ideas originales como el hermanamiento con El Perdigón o la celebración de un congreso el próximo año 2015.

-¿Por qué se presenta?

-Por lazos familiares. Mis primeros recuerdos son de la Cofradía de Nuestra Madre. Primero por mi abuela y, después, por mi madre. Quiero aportar mi granito de arena por y para la hermandad.

-Conoce la cofradía desde dentro...

-He estado cuatro años como vocal y ha sido un orgullo pertenecer a la junta directiva de Josefina Yugueros. Ahí he aprendido que detrás de una cofradía hay mucho trabajo. Ahora que mi tiempo me lo permite, creo que puedo dedicarme a ello.

-Habla de la segunda cofradía más grande de Zamora, ¿no le asusta?

-No puedo negar que esto me ha desbordado un poco. Nunca pensé que un candidato a unas elecciones como éstas despertara tanta importancia. Siempre me he considerado una persona cercana y creo que hablando se puede llegar a un buen fin.

-Se ha desmarcado un poco de la campaña que han realizado el resto de candidatos, ¿por qué?

-Cualquier propuesta depende de la asamblea general. Si llegara a ser presidente, sería una gestora con el beneplácito de los hermanos. En cuanto a las ideas, todo está inventado.

-Usted propone el regreso del desfile a las calles comerciales...

-Un recorrido por las calles de Santa Clara y San Torcuato nos ayudaría a dinamizar la procesión y eso beneficiaría a todos.

-También plantea un acto previo al desfile...

-Pensando en la gente mayor y en los niños. El acto tendría lugar en San Vicente y la megafonía ayudaría a seguir en el exterior el canto de la Corona Dolorosa y el Stabat Mater.

-¿Propone algún tipo de restauración?

-Cualquier esfuerzo económico grande tiene que ser votado por la asamblea. Sé que hay que restaurar el Santo Cristo, el retablo de las Espadas y la iluminación del camarín.

-¿Qué relación le une a Josefina Yugueros?

-Josefina me dio la oportunidad de pertenecer a una junta y mi relación con ella es buenísima. Le estoy agradecida porque ha realizado un buen trabajo, siempre pensando en que hacía lo mejor para la cofradía. Ella tiene su manera de pensar y yo la mía, porque cada persona es un mundo.

-¿Qué apoyos tiene?

-Detrás de mí hay muy buena gente que quiere trabajar. Me siento muy apoyada.