Los 50 kilos de drogas incautadas en 1.961 operaciones por la Guardia Civil, la Policía Nacional y Municipal el año pasado en la provincia acaban de ser derivadas a Asturias para su incineración en hornos especialmente construidos a tal fin y que realizan la cremación de la práctica totalidad de este tipo de sustancias decomisadas en todo el país, según ha informado la Subdelegación del Gobierno, encargada de llevar a cabo la destrucción, previa autorización judicial.

Las drogas se corresponden con las actuaciones realizadas el año pasado. Del total de los expedientes abiertos, 1.929 son administrativos, que conllevan una sanción económica, mientras que los otros 32 están vinculados con procedimientos judiciales. Las drogas incautadas pesaban 50,36 kilogramos, en su mayoría cocaína (101 gramos) y drogas sintéticas (81), seguidas de cannabis sativa (26,311), hachís (23,599), heroína (11), medicamentos psicotrópicos (24) y otras sustancias (239). Los estupefacientes y los psicotrópicos decomisados en operaciones policiales se quemarán a lo largo del día de hoy, tras ser conducidas a la Comunidad asturiana en contenedores especiales y con las medidas de seguridad adecuadas para evitar el posible asalto y pérdida de las mismas.