Como siempre, la impronta inconfundible de Jesús Yacente luce entre los muros de la iglesia románica de San Cipriano, donde decenas de fieles se han acercado ya para tomar fotos y ver de cerca las heridas y el rostro de la imagen titular que desfila esta misma noche.

La imagen, rescatada a principios del siglo pasado del extinto templo de San Cipriano, espera las once de la noche. Por la mañana, los hermanos del Yacente, acompañados de personalidades del mundo semanasantero y de autoridades locales y regionales presentarán la nueva fundación «Christus Yacens» en el Teatro Principal (13.00 horas) con entrada libre hasta agotar el aforo. Como broche a la puesta de largo del órgano benéfico, el coro interpretará el Salmo 50 del Rey David, esto es, el Miserere que se repetirá ya de madrugada en Viriato.