La Junta de Cofradías de la Semana Santa de Alcañices ha acordado la unificación de las dos hermandades que sobreviven en la Villa actualmente: la Vera Cruz y La Dolorosa, con vistas a una mayor organización de la Pasión. Los hermanos y hermanas participantes en las reuniones han aprobado como cuota a pagar anualmente 5 euros.

La cofradía de la Santa Vera Cruz fue constituida en 1920 fijándose como su indumentaria el hábito de color morado, con cíngulo amarillo y guantes blancos par el Jueves Santo. En Viernes Santo se mantenía la misma túnica pero el cíngulo y los guantes cambiaban su color por el negro. Ella fue la auténtica dinamizadora de la Semana Santa en incorporando en sus primeros años al Cristo Yacente donado por Manuel Calvo Casado y la Urna de Cristal por su hermano Antonio, que hizo Félix Martín «El Serrador» que este Viernes Santo volverá a lucir tras ser restaurada por el devoto Isidro Rivas Gago.

Tras 50 años la hermandad comenzó a decaer, hacia 1970, y los hábitos comenzaron a desaparecer, unos al ser utilizados como mortaja de sus dueños, otros por el deterioro y otros arrinconados en los baúles.

Por otra parte la Madre del Señor ya está lista en la iglesia de Nuestra Señora la Virgen de la Salud para procesionar de nuevo con todo su esplendor en esta Semana Santa, una vez que ha sido restaurada altruistamente en los últimos días por una familia de carpinteros y devotos de la vecina localidad de San Juan del Rebollar.