La Penitente Hermandad de Jesús Yacente volverá a salir de la iglesia románica de San Cipriano, pese a las obras que se desarrollan en el exterior del edificio y con motivo del cierre de su sede habitual, Santa María la Nueva, sometida a una profunda excavación arqueológica que inhabilita el templo para cualquier tipo de actividad

El año pasado, los hermanos ya salieron de San Cipriano y bajaron a continuación a los Barrios Bajos. Conforme al criterio de la hermandad de rotar los recorridos, la procesión buscará este año la plaza de Claudio Moyano para dirigirse a Viriato, continuar por la Plaza Mayor y bajar la cuesta de Balborraz. De regreso, el desfile subirá la cuesta de San Cipriano para cantar el Miserere en la plaza de Viriato pasada la medianoche, como es tradición, y regresar a continuación al templo de salida.