Andrés Luis Calvo y Luis Cid Fontán recibirán el Domingo de Ramos la distinción Barandales de Honor 2012 por al apoyo que mostraron a la Semana Santa de Zamora cuando ocupaban el cargo de alcalde de Zamora y presidente de la Diputación, respectivamente. Y es que estando ellos al frente de estas administraciones se logró la Declaración de Interés Turístico Internacional y se organizó el primer Congreso Nacional de Cofradías en la ciudad. Estos méritos, entre otros, han tenido en cuenta los representantes de las cofradías que decidieron anteanoche «por unanimidad» que los antiguos políticos recibieran el mayor reconocimiento de la Junta Pro Semana Santa.

Desde el organismo semanasantero reconocen que «sonaron otros nombres», pero «su labor ha pesado mucho», precisa el presidente de la Junta Pro Semana Santa, Francisco González Poza, que menciona que «públicamente pidió para ellos el Barandales el presidente del comité organizador del Primer Congreso Nacional de Cofradías, Eduardo Pedrero, a través una carta» y nuevamente se demandó con motivo de una reunión conmemorativa del 25 aniversario del evento semansantero nacional.

«El reconocimiento de algo que huele a Semana Santa para un zamorano es un gran honor», menciona con alegría Luis Cid Fontán, quien se confiesa semanasantero, aunque es cofrade «de los fila». El antiguo político agradece «el gesto de los impulsores del Congreso y de los representantes de la cofradías que creen que lo merecemos» al tiempo que remarca: «Es de las cosas que me produce gran satisfacción, aunque creo que es poco merecido».

Quien ocupara desde 1983 hasta 1991 la presidencia de la Diputación de Zamora alude a que «únicamente creo que estuve en el lugar preciso en el momento adecuado. «Tanto el Ayuntamiento de Zamora como la Diputación apoyamos el Congreso Nacional, un evento que apetecía realizar tanto en Murcia, como en Valladolid o en Sevilla», recuerda. Cid Fontán detalla que «hubo un gran equipo organizador para que todo saliera bien y la gente asistió encantada, lo que con el paso de los años recuerdo con mucho cariño».

Por su parte Andrés Luis Calvo, alcalde cuando se consiguió la Declaración de Interés Turístico Internacional, se muestra «agradecido y algo sorprendido» con el Barandales de Honor a la par que remarca: «Nosotros éramos la cara visible de un gran equipo de personas que, con mucha ilusión, trabajaron de una manera muy ardua para conseguir el reconocimiento que entonces tenían muy pocas ciudades».

Desde su punto de vista la declaración «ha ayudado a que las cofradías cuenten con miles de integrantes», dado que «desde entonces aumentó la inscripción», y fundamentalmente «se incrementó el turismo que viene en Semana Santa a la ciudad». El antiguo regidor cree que «tanto el Congreso Nacional como la declaración pusieron a Zamora dentro del mapa de las Semanas Santas». El socialista esgrime que ambas actividades «fueron un ejemplo de cooperación entre dos instituciones». «Pese a que cada una era de un color político, la Diputación estaba en manos de la entonces Alianza Popular y el Ayuntamiento era socialista, el fin era lo que más nos importaba». «Creo que en aquella época se valoraba más que ahora la cooperación entre las instituciones», subraya.

El primer alcalde que «no se arrodilló» al ofrecer el silencio de la ciudad ante el Cristo de las Injurias afirma que «la época en la que gobernamos Luis y yo también eran tiempos económicamente malos, pero en ese momento teníamos presente que una de las partidas intocables eran las asignadas a Semana Santa», y añade: «Ese pensamiento también existió incluso cuando estuve en la oposición».

«Es un honor recibir este reconocimiento que creo que es poco merecido porque únicamente estuve en el lugar preciso en el momento adecuado»

«El Congreso de Cofradías era un evento que apetecía hacerlo en otras ciudades, pero las dos instituciones apoyamos su celebración en Zamora»

<Luis Cid Fontán >

Presidente de la Diputación de 1983 hasta 1991

«Fuimos la cara visible de un gran equipo que trabajó con mucha ilusión para lograr la Declaración de Interés Turístico Internacional. Con ella y el Congreso Nacional dimos a conocer esta Pasión»

«En aquella época creo que se valoraba más la cooperación entre las instituciones y las partidas asignadas a la Semana Santa eran intocables»

<Andrés Luis Calvo >

Alcalde de Zamora de 1983 a 1987, y desde 1991 hasta 1995