El consejo rector programado para la noche de ayer saltó por los aires cuando los miembros del sector crítico de la Junta pro Semana Santa decidieron abandonar la reunión a la hora de iniciarse tras conocer los planes de la junta directiva para enjugar el déficit de 50.000 euros en las cuentas, responder a todos los pagos pendientes y «acabar el año 2012 con superávit». Así las cosas, es previsible que la asamblea general del órgano semansantero eche atrás los números de 2011, un hecho que ya ocurrió el pasado año y que abundaría en una grave crisis económica.

Todo pese a que la directiva negó una posible quiebra y se comprometió a «pagar todo lo que debemos en septiembre» una vez que lleguen las subvenciones pendientes del pasado ejercicio y las comprometidas el curso actual. Ayer mismo, la situación económica sufrió otro varapalo al confirmarse que el órgano no podrá cobrar los 30.000 euros de Loterías y Apuestas del Estado al no estar declarado de utilidad pública, una situación en vías de solucionarse, según comunicó la directiva. El otro problema radica en los 25.000 euros que, según la Junta, les adeuda la Sociedad de Turismo correspondientes al ejercicio de 2010.

En el peor de los escenarios, la directiva -que se quedó con la mitad de las cofradías en la búsqueda de un consenso- calcula que finalizará el año con unos 5.000 euros de superávit dado que la bajada de ingresos se compensaría con la reducción drástica en el apartado de bandas de música.

Otro de los problemas que abordaron los miembros del consejo rector de ayer fue el cierre de las cuentas de 2010, que están pendientes de una ayuda de la Sociedad de Turismo por valor de 25.000 euros. Tal y como reconoce la directiva, diferentes cofradías adelantaron 40.000 euros al órgano gestor para cubrir las bandas de ese año, un préstamo que deberán devolver salvo la aportación de las hermandades que emplearon bandas ese año.

Con respecto a 2011, la Junta reconoce que tendrá un déficit de 29.000 euros una vez que reciba la subvención municipal de 63.000. Según las cuentas presentadas por González Poza, en el haber, el órgano contaría con 107.000 euros de subvenciones que suman el Ayuntamiento, la Diputación, el Patronato y la Junta de Castilla y León. Con esa cuantía lograría compensar los números.